La misión de Project Commotion es fomentar el desarrollo saludable de niños con diversas capacidades mediante el movimiento con propósito, el juego y las relaciones familiares y comunitarias. Fundado por dos mujeres artistas marciales —una de ellas latina de origen mexicano—, Project Commotion surgió para abordar la falta de espacios creativos asequibles y accesibles para niños y familias en el Distrito de la Misión de San Francisco.

Con un currículo culturalmente relevante, Project Commotion ofrece programas bilingües de movimiento creativo en inglés y español, que incluyen danza, capoeira y teatro, para niños de todas las edades. Nuestro enfoque relacional de las artes escénicas enfatiza el aprendizaje socioemocional, la conexión y el bienestar integral.

Nuestros programas:

• Escuelas en movimiento: Incorporando el aprendizaje basado en el movimiento a las escuelas, mejorando la concentración, la autorregulación y el compromiso académico.
  
• Preescolar Las Luciérnagas: Un programa bilingüe de educación infantil basado en el juego que enfatiza el movimiento y el desarrollo socioemocional.
  
• Clases extraescolares y de fin de semana: Programas de danza, capoeira y movimiento creativo para todas las edades, que fomentan la confianza y la coordinación.
  
• Movimiento comunitario: Talleres y tutorías para padres, educadores y profesionales para integrar el movimiento en las rutinas del aula y del hogar.
  
• Grupos de juego para el desarrollo: Estos grupos, basados en el juego, apoyan a niños (de 0 a 3 años) que están siendo monitoreados por retrasos en el desarrollo y discapacidades, y a sus familias, mejorando sus habilidades motoras, de comunicación y relacionales.

Historia de un estudiante del Proyecto Commotion (escrita por Z):
A Z le diagnosticaron trastorno por déficit de atención e hiperactividad a una edad muy temprana. Pasó gran parte de su infancia con terapeutas y especialistas: era hiperactiva, propensa a crisis y rabietas, y tenía dificultades con la motricidad fina, para quedarse quieta y para seguir instrucciones. A los 7 años, ya la habían rechazado en la mayoría de las clases y actividades extraescolares a las que intentó asistir.

Cuando Project Commotion abrió sus puertas en 2008, ella fue una de sus primeras alumnas. Se inscribió en la clase de capoeira impartida por la cofundadora Susan Osterhoff e inmediatamente se adaptó al ambiente flexible de la clase, que ofrecía muchas oportunidades para movimientos enérgicos y de gran envergadura, como acrobacias y caídas. Project Commotion era uno de los pocos lugares que fomentaban y valoraban su entusiasmo e impulsos, que no intentaban que se callara y se quedara quieta, sino que le proporcionaban una vía de escape y una dirección para su energía. Siempre una niña testaruda e independiente, las clases lúdicas y orientadas a la exploración eran perfectas para ella. Las clases de capoeira para jóvenes no se centraban en formas ni secuencias; en cambio, les daban a los alumnos las bases para improvisar sus propios juegos con sus compañeros. Z aprendió no solo patadas y volteretas, sino también habilidades de comunicación, regulación emocional y autoconfianza.

La capoeira se convirtió en la pasión de Z, y a los nueve años ya tomaba clases tanto para niños como para adultos. A los trece, pasó un verano como voluntaria en el Campamento Commotion, donde trabajó por primera vez ayudando a otros niños como ella a aprender y crecer. “Es un gran privilegio poder conectar con niños como yo, niños a los que llaman raros, ruidosos o exagerados, y darles la oportunidad de jugar, moverse y simplemente ser ellos mismos durante una hora”.”